Una novela tremendamente divertida e inteligente donde los personajes, todos ellos mujeres lesbianas, se hacen rápidamente entrañables al lector. Lola Van Guardia sabe crear muy bien la atmósfera de suspense, en la que los acontecimientos nos llevan a una hilarante trama que va destapándose página a página. El amor, la amistad y la complicidad se dan cita en este libro, aderezadas con intrigas políticas.