“Valiente, sin autocensuras ni ultranzas; cuidadosa de su lenguaje, exorbitado cuando es necesario pero deliciosamente fino y recatado allí donde la realidad también lo es… Leerla es tocar de lleno en nuestra realidad, allí donde el plural sobrepasa las limitaciones del pasado; leerla es participar en una búsqueda de identidad latinoamericana que contiene por adelantado su enriquecimiento. Los libros de Luisa Valenzuela son nuestro presente pero contienen también mucho de nuestro futuro: hay verdadero son, verdadero amor, verdadera libertad en cada una de sus páginas”. (Julio Cortázar)
Realidad nacional desde la cama ha de sorprender al lector mexicano, al lector latinoamericano, y sin duda también al lector sajón familiarizado con la obra de Luisa Valenzuela. No se trata de un cambio en su temperamento artístico, sino, más bien, de un incremento de la participación de lo real en cuanto verdadero protagonista del relato como consecuencia de la devastación psicológica y espiritual sufrida por los individuos en su trato con la locura autoritaria. No pensar, no sentir, no recordar…
Las consignas de este demoledor personaje que es nuestra realidad nacional se han metido en los gestos, las conductas y el corazón de las personas. A través de la sátira y el grotesco, Luisa Valenzuela ha compuesto un fresco aterrador de Argentina, donde el humor, la ironía, la vibración literaria y la desesperada voluntad constructiva, abren una luz en la opacidad sanguinaria de nuestra vida cotidiana.