Si hay una escritora que sabe hablar del encierro esta es Fernanda Trias. La azotea es prueba de ello con la historia de Clara viviendo en las cuatro paredes de su casa con su padre y después con su hijo. La narración es de asfixia, las relaciones familiares de decadencia, de agresión pasiva, los animales y los objetos son parte de esas relaciones. La jaula es el encierro y el pájaro la fragilidad de la vida. La novela, con varias reediciones y traducciones, fue seleccionada entre los mejores libros del año por el suplemento cultural de El País y le valió el tercer lugar del Premio Nacional de Literatura Édita (2002), el premio Joven Sobresaliente (2003) y el Premio a la Cultura Nacional de la Fundación BankBoston (2006). Con el Trias muestra al mundo, siendo muy joven, el talento y potencial que después hemos presenciado con obras como Mugre rosa (Penguin Random House, 2021)