Como cada año la revista Literal Magazine, me extendió la invitación para hablar de tres libros que pienso al final del año. La acepté de inmediato pero aproveché para escribir también sobre algunos de los premios que este 2022 les trajo a magníficas escritoras. Acá una probadita y la invitación de que, cuando aparezca publicado en esa revista, vayan y lean el artículo completo.
El recorrido que hago, además de celebrar los reconocimientos que recibieron estas escritoras, me hace pensar en sus trayectorias y obra y en los motivos por los cuales los recibieron. Algunas veces es por una larga trayectoria de trabajo como el Premio Miguel de Cervantes Saavedra a Cristina Peri Rossi; o el ingreso a la Academia Norteamericana de la Lengua Española a Jeannette L. Clariond y a Martha Ana Diz; o el Premio Internacional Carlos Fuentes a la Creación Literaria en el Idioma Español para Margo Glantz; y el Premio Excelencia en las Letras José Emilio Pacheco a Carmen Boullosa. O como el Premio Enriqueta Ochoa 2022 para Claudina Domingo Hernández.
Otros son por una obra específica como el caso del Premio Las Librerías Recomiendan, Grupo Kirico y Zona Cómic donde las escritoras arrasaron este año con Laura Fernández en Ficción con La señora Potter no es exactamente Santa Claus (Literatura Random House), Vivian Gornick en No Ficción con Cuentas pendientes (Sexto Piso), Ángela Segovia en Poesía con Mi paese salvaje (La Uña Rota) y Clyo Mendoza quien recibe el Premio Javier Morote, otorgado a escritores jóvenes, con Furia (Sigilo /Almadía). También lo fue el Premio Sor Juana Inés de la Cruz, otorgado por la Feria del libro de Guadalajara, para Daniela Tarazona, por Isla Partida.
Otros son por traducciones como el que recibieron Samanta Schweblin y Megan McDowell, el National Book Award , un reconocimiento que debe ser visto como un gran logro para ellas, para la traducción y para las letras hispanoamericanas. Los invito a que se tomen unos minutos para ver el video de la premiación en donde me conmueve que Samanta haya mencioando a su editorial, la primera que confió en su libro, Páginas de Espuma.
Otras preseas reconocen la investigación literaria como el Premio Alfonso Reyes para la poeta e investigadora Malva Flores. Y ¿qué me dicen de la 26o emisión del premio Antonio Sancha 2022 de la Asociación de Editores de Madrid (AEM) para Irene Vallejo?
La lista es larga y jugosa, y en los nombres de todas ellas, para quienes nos hemos tomado el tiempo de leerlas, vemos claramente que se premia y reconoce su talento, su universalidad, su gran potencial estético y temático, su arduo trabajo de investigación, su uso del lenguaje, que como diría María Negroni, es el personaje principal de la obra, que saben que la literatura es el resultado de la inteligencia, la disciplina y la creatividad. Yo creo que nos vamos ya quitando de etiquetas —me refiero al de "literatura femenina"— que muchos usan ahora de manera mal contextualizada e incluso mal intencionada, para definir su escritura y con ello segregarlas a una sección aparte, en una subcategoría, para no reconocer que su obra es parte de un solo cuerpo literario en donde las escritoras están haciendo un fuerte impacto.
Felicidades a todas ellas, gracias por abrir espacios a otras muchas escritoras que representan lo mejor de nuestras letras contemporáneas.
Pronto... to be continue en Literal Magazine, se quedarán con el "ojo cuadrado", como dicen en mi tierra, de ver qué año tan expectacular en cuestión de premios fue el 2022.
Y les comparto una preciosa fotografía de una de mis bibliotecas favoritas: Profética. Puebla, 2022